Clemencia

Al cielo grité tu nombre y luego un estruendo se sintío.

Es posible fuera el clima, es probable fuera Dios.

Alcé mi mirada rota, fragmentada por tu desengaño.

recogiéndome el corazón desgarrado entre mis manos.

Caí pronto de rodillas. Me sentía derrotada.

Quería lavar mi memoria, para no saberme lastimada.

Mirando al cielo en desespero, en sufrida agonía;

Rogué por divina clemencia.¡Por piedad una nueva vida!

Te ofrezco señor mi destrozado corazón.

Que fuera abatido por el dolor.Mi alma ya la hube vendido

Por un poquito de su amor mal habido.

Dame otra oportunidad. Quiero sentir amor verdadero.

No mendigar migajas a un corazón usurero.

Mis ojos se llenaron de mar. Que salía de sus caudales.

Mientras el viento llenaba mi pecho con su aliento suave.

De pronto, otro estallido celestial.

Estaba tan apenada que no pude mirar.

El viento soplaba más fuerte, el techo celeste se abrió.

Me sentí bañada de luz y de calor interior.

Mi corazón ya latía en mis manos, completamente remendado.

Las magulladuras de tu desamor, habían ya cicatrizado.

Alcé la mirada al cielo, y respiré con el corazón.

En mis ojos una solitaria lágrima, agradecida brilló.

Las nubes se disiparon, el sol templaba a mi alrededor,

Volví a sonreir luego de sentir, que fui acariciada por Dios.

Y ahora que el tiempo ha pasado, al fin logro comprender,

Que debí habitar el infierno para con seguridad saber,

Que siempre viví en el paraiso, mas no lo pude ver.

Ya que tu oscuridad eclipsaba cada nuevo amanecer.